The Smashing Pumpkins durante la primera noche de su reciente visita a México. Foto Píntalo de Negro
Venían por una fecha y finalmente abrieron tres más, pero había que estar en esa primera noche que marcó el regreso de la banda que no ha dejado morir Billy Corgan. Fueron un par de horas estridentes, atmosféricas, con aproximaciones a la nostalgia y con la inevitable cita de las canciones del último trabajo, hasta hoy, de los de Chicago.
Despertar un día y encontrarse con que después de una década los Smashing Pumpkins volverían al país, el 5 de mayo sería la cita. La demanda fue tal que pronto se sumaron tres fechas más, todas agotadas.
Regresando a México después de 10 años.
“No podemos esperar a tocar una vez más frente a nuestros grandes fans de la Ciudad de México. Tanto yo como la banda les prometemos que este show será una noche que recordarán por siempre” – @williampcorgan
Y tuvo razón. Quizá si no hubieran elegido ese lugar no habría sido un show tan memorable, porque, al menos la noche del jueves 5 de mayo, el Teatro Metropólitan parecía haber sido edificado para que sonara la música oscura de los que iniciaron como cuarteto en 1988.
Y es que ver al líder de Smashing Pumpkins desde un lejano y gigante escenario no permitiría percibir la extrañez de su presencia. Ni escuchar sus discos, ni ver videos, ni leer sus poemas, llegan a transmitir la rareza de ese personaje como tenerlo a 50 metros de distancia.
Desde 2018 se anunció la reunión de tres de los miembros de la alineación original para el tour Shiny and so Birght con el que recorrieron 36 ciudades de Estados Unidos y nos emocionaron con la posibilidad de que cruzaran la frontera para dar una fecha en esta ciudad.
No fue hasta cuatro años después, el jueves 5 de mayo de 2022, en que Corgan por fin volvió a nuestra ciudad para subirse al escenario junto a Jimmy Chamberlin, quien se sentó en la batería, y James Iha, a cargo de las seis cuerdas, tal y como lo hicieron en su álbum debut Gish (1991).
Los acompañó Jeff Shroeder, quien fue el guitarrista en la ausencia de Iha y a quien no se le dijo adiós en la reunión, al contrario, se saludó a una nueva formación con tres guitarras que se mantiene hasta ahora.
La esperanza de que D’Arcy Wretzky esté un día nuevamente rascando el bajo a un lado de sus excompañeros ya la hemos perdido. Desde el anuncio de la reunión la rubia reapareció para confirmar que fue invitada por Billy pero que después él mismo se retractó. Los motivos varían según quien narre pero se concluye que los problemas entre ambos miembros prevalecen y la rebelde D’Arcy no iba a ceder ante las leyes del estricto, perfeccionista, vocalista y principal compositor de la banda.
El lugar de la añorada bajista original ha sido ocupado desde su salida en 1999, un tiempo por la canadiense Melissa Auf der Mor, quien también fue integrante de Hole; Ginger Reyes y Nicole Fiorentino a quien vimos en Veruca Salt. También tuvieron miembros de apoyo en algunas presentaciones como el bajista de The Killers, Mark Stoermer y Katie Cole. Para los shows de México y como ha ocurrido en sus giras desde 2015, es Jack Bates, hijo de Peter Hook, quien se hizo cargo del bajo.
Debe ser significativo para Corgan tener entre sus filas a este joven que apenas rebasa los 30 años y que respeta el estilo de tocar de su padre. El líder de Smashing Pumpkins ha dejado clara su admiración por los proyectos de Hook con versiones de clásicos de Joy Division como ‘Transmission’, que forma parte de su set desde los años noventa y que sonó en aquella primera tocada que ofrecieron en nuestro país en el Palacio de los Deportes en 1998, o ‘Ceremony’ y ‘Love Will Tear us Apart’ que formaron parte de su concierto de 30 aniversario.
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El listado de canciones montadas para sus recientes tocadas en el Beale Street Music Festival en Memphis Tennesee, y en Tech Port Center en San Antonio, Texas, las primeras después de la pandemia, fue respetado para ese jueves 5 de mayo, en que se presentaron en el que un día fue el Cine Metropólitan.
Muchos aún no entraban al lugar cuando ellos aparecieron, justo después de la composición de inicios del siglo XVIII del alemán G.F. Handel, tema que se ha convertido en ritual para dar entrada a los de Chicago. La gente los recibió con estruendo, son una banda con un buen número de fieles y adoctrinados mexicanos.
La noche inicia con ‘The Colour of Love’, parte de su último disco Cyr (2020), un tema sorprendentemente bien recibido por fanáticos y nuevos adeptos. El sonido es diferente, mucho más suave y de fácil entrada para nuevos escuchas.
Con la novedad de que Billy baila y se le mira con extraños pasos animados que no lucen naturales para la imagen sobria y oscura que nos ha reflejado desde los noventa. Sin parar llega una favorita: ‘Bullet With Butterfly Wings’, este sí es el sonido al que nos tienen acostumbrados.
Suena otro clásico de Siamese Dream. Un éxito como ‘Today’ cuando va arrancando la tocada siempre se va a agradecer. Le siguieron ‘Ugly’, ‘Drown’, ‘Quiet’ y ‘Cyr’, que titula su disco actual.
Sonó ‘Once in a Lifetime’ de Talking Heads, tema que integran en los sets desde hace al menos dos décadas. Un tema nada cercano a la versión original que todos conocemos. Difícil reconocerla en los instrumentos de los de Chicago. Después se escucharon ‘Solara’ y ‘Eye’.
Llegó el momento de ‘Ava Adore’ de su álbum de 1998 y una hermosa versión acústica de ‘Tonight, Tonight’ que hacen Iha y Corgan solos en el escenario y la gente a sus pies cantando cada palabra.
El verdadero estruendo de aplausos y gritos se lo llevan éxitos como ’Zero’, ‘1979’ y ‘Disarm‘, pero también son muy celebrados temas de verdadero atasque, con largos solos como para perderse en un trance metalero como ‘X.Y.U.’ o ‘Silverfuck’. Los seguidores de la banda gozan de esos momentos envueltos en una convulsión en la que a veces bailan y aveces tocan un instrumento imaginario.
No sabemos si Billy Corgan regresa a esta ciudad, pero queda claro que si no lo hiciera este fue un buen cierre para la historia con sus seguidores en esta parte del planeta que, según mencionó en algún momento de la noche, es el lugar donde más se escucha a Smashing Pumpkins en el mundo, de acuerdo a las cifras de los servicios de streaming.
Un par de días después de esta tocada, la cuenta oficial de Corgan publicó fotografías del músico paseando en el Museo de Antropología en la Ciudad de México. Se le notan los años que no se percibían esa noche bajo su traje vampiresco. Con sus compañeros de banda no es diferente, a Chamberlin incluso fue difícil reconocerlo en la foto usada para promocionar los conciertos. Pero el sonido no ha cambiado, sigue ahí, eterno.
